viernes, 1 de junio de 2007

Homenaje a los caídos

Hola, como marcha todo?
Hoy salí temprano de clases y se me ocurrió dar un paseo por la peatonal, calle Florida. Luego de un viaje en bondi de poco más de 1 hora, me bajé al cruzar la Avenida 9 de Julio. Paseando uno ve de todo, y mucho mas en una peatonal no? Estaban los que se hacían estatua, los que se hacían los magos y los que se hacían los boludos como yo y no miraban ni a los magos ni a las estatuas... Entonces luego de un par (largo) de vidrieras y de un shopping que era un lujo, no me acuerdo el nombre pero tenía unos pisos de mármol blanco ultra pulidos que reflejaban más que el espejo de mi baño. Llegué al final de la peatonal y me encontré con una plaza, que en ese momento no sabía como se llamaba. La cuestión es que la placita esta se encuentra frente a la Torre de los Ingleses, monumento que se ve muy claramente desde el punto donde yo estaba parado. Como no sabía adonde ir, crucé la plaza y me encontré con otro, en este caso un homenaje a los caídos en Malvinas durante la guerra. En esa placa se revelaban unos 346 nombres según me informó un hombre vestido de marinero que tenía una trompeta en la mano. El monumento está custodiado por dos marinos armados con bayonetas, que supuestamente no deben hablar y deben mantener una rigidez estricta, aunque como yo era la única persona en ese momento por ahí, noté que algunas palabras se cruzaban, aunque parecían ventrílocuos. En fin, al momento en que decidí abandonar el lugar y partir para casa, observé que venían caminando carrera mar cuatro personas vestidos de marineros y uno de ellos traía una trompeta. Y al cabo de unos minutos tuve la suerte de ver el arriamiento de la bandera nacional que se encontraba flameando frente al monumento. La bandera tenía unas medidas aproximadas de 5 metros de ancho por 8 de largo y, al momento de ser arriada, el trompetista tocó esa famosa melodía... esa que dice: Tan tatán, tan tatán... y siempre así, esa que tocan cuando alguien se muere... ustedes saben!! Y uno de los marinos comenzó a girar la manivela mientras otro se desvivía por impedir que la misma toque el suelo. Luego de eso, el trompetista saludó a los 2 marineros que custodiaban el monumento (los de la bayoneta) y todos se fueron caminando carrera mar. No se adonde iban y le pregunté al trompetista, me respondió esa y otras preguntas mas que le hice, luego se fue y yo también. Que loco no?

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