Carta de un amigo

Esta en una cartita que escribió un amigo de Buenos Aires. No se quien es el destinatario, si la gente o el mismo. De todas formas es una opinión personal y está buena... Acá va:

¿Y con la marihuana qué?

Esta época es muy difícil para mi porque yo hice ya público mi vicio hacia el cannabis. Yo lo tomo como uno de los grandes placeres de la vida. Y no pienso dejar de hacerlo nunca en la vida. La cultura rasta es impresionante. Ojalá fuéramos gobernados por rastas, serían mucho mejores que los ladris que están ahora. Por lo menos serían honestos. Los tipos se preocupan por el otro, o sea, nunca te van a robar, nunca te van a mentir y son súper serios en lo que hacen. Bueno, volviendo a mi tema, yo tomo esos parámetros rastas como mis guías. A mí me importa un carajo la ley. Yo fumo marihuana. Es ilegal. Entonces yo me pregunto: ¿por qué mierda es ilegal? Si no jodemos a nadie! Yo fumo regularmente desde los 20 años. Ya tengo un archivo personal de la evolución de la marihuana dentro de uno. Yo puedo asegurar que no es adictiva. Esos pelotudos que dicen que son el puente para las droga duras me indignan. ¿cómo les da la cara? Gente de mierda… La marihuana es una planta que si la cuidás florece y luego fumás las flores de la planta que cuidaste durante un tiempo. Cuidarla es muy divertido. Mi estrategia es hablarles, les dejo música cuando me voy y les doy charla cuando trabajo en la compu. Cuando uno fuma es como si se abriera a sus sentidos. Como si entrara en armonía con uno mismo. Lo divertido es que cuando uno abre el canal, ya lo conoce. Puede seguir volviendo a ese estado mental sin necesidad de más marihuana. El canal ya está ahí. En el uno busca sentirse bien, y la mayoría de nosotros, para sentirnos bien, tratamos de hacer las cosas lo mejor que podemos. Ya con eso nuestra conciencia está limpia. Pero a mí eso solo no me alcanza. Yo además tengo una pequeña ambición profesional. Más que nada para demostrarme primero a mí y después a los demás, quién tiene razón. Yo soy absolutamente consciente de las decisiones que tomo, y tengo
que soportar a muchos imbéciles que me faltan el respeto porque uso pantalones verdes buena onda. -Mirá, ahí viene el drogón!- dicen en la facu. Que me la chup... (sensurado por el autor de página, osea yo. Shhh, creo que decía algo como chupen, shhh). Ya le puse los puntos a más de uno porque se pasaron de vivos.
El consumo de marihuana no crece exponencialmente como todos creen, simplemente porque no nos da el tiempo. En los comienzos del consumo la crecida es muy limitada porque uno fuma ocasionalmente, por lo general cuando sale. Después uno compra por primera vez. Es una experiencia única. Es quebrar al sistema. Lo más lindo es fumar con la gente querida, porque nos relajamos juntos y realmente nos conectamos. No estoy diciendo que no nos conectemos cuando no fumamos. Al contrario, también conectamos, porque ya tenemos el canal abierto. Es copado el ritual de armar un porro, utilizando las más sofisticadas herramientas. Las tuqueras son un arte oculto. No entiendo cómo se le ocurren esas cosas a la gente. Son muy ingeniosas... Ya está! Quería dejar asentado este pensamiento para no olvidármelo nunca en la vida. Hay cosas más importantes en la vida que fumar marihuana. Ser buenas personas es más importante...


Mmm... yo de vuelta... Carlos... el de la página... ese... Ahh, buena la carta no?