lunes, 8 de febrero de 2010

Lo que dejamos

Siempre que alguien desaparece de nuestras vidas ocurren dos cosas curiosas: La primera es el vacío que provoca en las personas que quedamos (infinita tristeza) y la segunda es el melancólico recuerdo de los buenos momentos que vivimos al lado de esta (la sensación de vacío se agudiza y es cuando provoca dolor).
La desaparición física es una inevitable consecuencia del ser vivo. Por ser humanos tenemos el plus de ser conscientes de nuestro deceso. Lamentablemente, ya que la vida es finita, también lo es todo lo que en ella se desarrolla.
Mañana a nadie le importará si hoy fuimos felices o si dejamos mucho y; mucho menos si perdimos oportunidades. Mañana todo habrá pasado como si a nadie le hubiera importado.
Por lo que no es tan útil lo que nos llevamos (sea dolor, sea felicidad) lo que realmente importa es lo que dejamos.
La herencia es lo que muestra al mundo que nosotros fuimos, que existimos en algún momento. La enseñanza, los sueños compartidos, la vida de todos, que es una sola al fin.
Todos tenemos recuerdos y nos reconfortamos en ellos, todos tenemos a quien llorar, a nadie le falta muertos.
Porque esos, los que ya no están, son los que dejaron marcas imborrables en nosotros, son los nuestros, los que nos conforman, los que nos hicieron.
No importa qué se llevaron y ni siquiera lo que nunca compartieron, lo que realmente importa es lo que nos dejaron, lo que hoy nos hace, lo que siempre estará en nuestro recuerdo.
Hoy podemos extrañar, hasta sufrir por ello. Mañana solo será un grato recuerdo, una llama inagotable de cariño, donde podemos reconfortarnos cuando el mundo se pone frío.

4 comentarios:

Eli dijo...

Carli!

Mi comentario de hoy es un poco indiscreto porque sin querer supe lo que hay de fondo en esta entrada.

Todos tenemos un muerto, es cierto, yo quizás tenga demasiados. Los mismos que vos, tal vez un poco más. Me gustaría decir que todos me dejaron algo pero a veces la sangre no es suficiente para sentir dolor de verdad.

Hay otras personas, sin embargo, que me tocó despedir demasiado temprano y, aunque me reproché una y mil veces todo lo que no disfruté, respeté ni viví con ellos, tendí a superarlo con ese agradecimiento infinito por solo haber existido.

El luto no se evita, se llora. Eso significa que hicieron algo bien, que marcaron personas, que dejaron huella. Y aunque el corazón solo sea un músculo y las emociones partan del cerebro, lo tengo lleno de cicatrices que llevo orgullosa.

Es difícil, tiro renglones descolgados, realmente no encuentro las palabras para expresar lo que quiero decir. Es ese entenderte sin necesidad de escribirlo, es ese teclear inútil.

Hay muchas entradas sobre este tema, yo nunca me lo planteé sinceramente, prefiero creer que, capaz, la muerte viaja en bondi.

(Y que conste que me cuesta ponerme seria con todo lo que me río con vos, ja.)

Protección en Radiaciones dijo...

Hermoso tu comentario Eli (así te digo acá, ja).
Creo que cualquier acotación de mi parte está en exceso.
Me gustó mucho lo que escribiste, como siempre. Y como siempre, esta vez te invito de nuevo a publicar algo si tenés ganas, a mi me encantaría!
Te dejo un beso enorme.
Carli

Juli dijo...

Debo admitir q una lagrimita rodó por mi mejilla... bueno.. no solo una. "Todos tenemos muertos" y si. Pueden pasar años y seguimos llorando a los q se fueron, a los q nos dejaron tanto, a los q nos marcaron tanto, alguien compartió conmigo solo seis meses de su vida.. los últimos seis.. nos peleabamos casi todos los dias! pero hoy, después de un año y casi cuatro meses todavía se me aprieta el corazón cuando me acuerdo de él, y solo eramos compañeros de trabajo.. era una de esas personas con brillo propio.. Qué te puedo decir Carli?? las cosas q escribís me llegaron al corazón, algo muy difícil de lograr, debo admitir..

Protección en Radiaciones dijo...

Juli!
No había visto tu comentario. Hermoso! Muchas gracias por lo que escribís. Todos tenemos muertos, lamentablemente. Son los recuerdos lo que nos acercan a ellos, aunque ya no estén entre nosotros. Imposible olvidar.
Besote y seguí el blog, por ahí sale alguna nota interesante. Jaja.
Beso!