domingo, 18 de noviembre de 2007

Descripción

Una mesa verde pintada a mano, se le ven los extremos gastados por las inclemencias del tiempo transcurrido. Un exquisito detalle de flores pintadas en su superficie, revelan una glamorosa época, tiempos perdidos, lejanos como el ayer. Sin embargo, no se siente sola. Cuatro tristes sillas, también de madera, la acompañan. No hace falta esforzarse para notar que las cinco piezas son una sola, sus partes forman la unidad, sin una, no hay nada. Si uno observa el salón que las contiene, puede llegar a sentir un breve alivio. Este, cuenta una historia diferente, una historia de pobreza y penas pero no así de falta de vida. Piso de parquet, ya muy gastado y peligrosamente astillado, hace notar que era un sitio lleno de vigor. La puerta-ventana, mirando hacia la avenida principal, permite el paso de los pobres rayos de sol, que se colan a través de los poderosos edificios... Cuatro sillones modernos, que desentonan con el esquema y una increíblemente vieja estufa a gas, completan el deprimente paisaje. Solo un hálito de extrañeza, puede hacer parecer, al menos por un instante, que la habitación tiene un débil pulso, de un viejo corazón, que se agota día a día...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hermosa descripcion carli. Puedo decir que por un instante estuve alli, Abrazos. Santi R.
PD: Segui escribiendo aunque no sepas que decir. "Solo trabajando aparece la inspiracion" ( Un tal Pablo Picasso).

El profe dijo...

Gacias primo! Muy cierto lo de Picasso. Gracias por seguir la página, aunque la actualice muy poco. Espero algún día una nota tuya. Un abrazo grando.